Proteger y cuidar la piel joven es fundamental para mantenerla saludable y prevenir problemas a largo plazo. Se aconseja:
Uso de protector solar: El protector solar es esencial, incluso en piel joven. Ayuda a prevenir el daño causado por los rayos UV, como el envejecimiento prematuro y las manchas. Se debe aplicar todos los días, incluso en días nublados.
Limpieza suave: Mantener la piel limpia es importante, pero es vital usar productos suaves y adecuados para el tipo de piel. Evitar productos agresivos que puedan resecar o irritar.
Hidratación: Usar cremas hidratantes adecuadas para el tipo de piel es crucial para mantener la piel suave y flexible. La hidratación previene la sequedad y mantiene la barrera cutánea intacta.
